viernes, 3 de julio de 2009

Empezamos julio...

Y hoy es el primer día del mes. Comenzamos JULIO con mucho calor. Todo el mundo se pregunta si este verano va a ser igual que el verano de hace unos años en el que hizo 5 olas de calor seguidas se vendieron más aires acondicionados que nunca. Esperemos que esta sea la única ola de calor del verano, que yo llevo tres días con dolor de cabeza y es del calor.

Y sigue el calor, pero yo hoy voy a intentar ignorarlo y me voy a ir de rebajas. Aunque los comentarios que he oído de ayer no son muy halagüeños. La gente que fue ayer dice que los descuentos no son para tanto, que las tiendas están hasta arriba con la ropa desordenada y que la ropa que hay está hecha a propósito para la temporada de rebajas de lo mal cosida que está. Yo voy a ir, mañana os cuento cuales son mis sensaciones.

En el tema empresa ha empezado la cuesta abajo, la semana pasada despidieron a una persona y ayer a otra, y se rumorea que mañana van más. Lo dicho cuesta abajo, espero no ver el muro que hay al final.

Ahí que ver, buscando cómo otras empresas promocionaban sus productos de PRL, me he encontrado con una web que tenía una sección sobre la motivación del personal. Y es de risa, si en tiempos normales lo de la motivación, en general se lo pasan por el forro de la camisa, en épocas de crisis con decirte la siguiente frase te dan por motivado:

¡Suerte que aún tienes trabajo!

O esta otra que es aún mejor:

¡Da gracias que has cobrado la nómina!

La situación laboral está muy mal, pero me parece increíble que te puedan decir esto y quedarse tan panchos. De hecho, yo en estos momentos estoy trabajando, pero podría ser que a las dos de la tarde me llamasen y dejase de trabajar hoy mismo. Porque en la empresa en la que estoy están poniendo en práctica esta forma de actuar, hay que reducir costes de personal y se han puesto a ello. Ya veremos si me toca.

Ayer, al final fui de rebajas, y he de reconocer que había gente en las tiendas, que mareaba mucho la ropa o los artículos, pero que sacaba poco la cartera. Eso sí, la gente y las tiendas se meten en el papel de estoy de rebajas, y la gente va con el chip de tengo que tocarlo todo, desplegarlo todo, probármelo todo... y las tiendas con el chip de cuanto más desordenada estoy más de rebajas me siento. Y al final entre la cantidad de gente, las colas y lo esparcido que está el género da miedo pasar.
Yo al final me compré unas cuantas cosillas, porque tuve suerte y cuando llegué al centro comercial no había casi gente, y cuando se llenó me pilló con las compras hechas.

No hay comentarios: